Para muchas empresas, los últimos cinco años han consistido en probar aplicaciones en contenedores y ejecutar pruebas de concepto. Pero ahora, las soluciones de nube híbrida están empezando a generalizarse y se están adoptando en los centros de datos empresariales de todo el mundo. De hecho, los analistas del sector han pronosticado que en el próximo año, un número cada vez mayor de organizaciones globales estarán ejecutando aplicaciones en contenedores en producción.
Sin embargo, sigue existiendo preocupación por la complejidad operativa en áreas como la seguridad, el monitoreo, la gestión de datos y las redes. Para superar estos desafíos, las empresas deben adoptar estrategias de infraestructura flexibles que simplifiquen la gestión de entornos de nube híbrida y agilicen el desarrollo de aplicaciones de próxima generación.